Nuestras carnes maduradas provienen de Estados Unidos, Argentina y en especial de Colombia, donde podemos tener un control en la trazabilidad de cada animal. (ya sea de res, cerdo o ternera) se someten a un proceso de envejecimiento por dos motivos principalmente: ablandar la carne para obtener terneza y potenciar su sabor. El añejamiento funciona gracias a la presencia de algunas enzimas que degradan las fibras musculares para que se deshagan y al mismo tiempo se deshidrate, logrando que se concentre mejor el sabor.